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Tensiones comerciales entre Washington y Pekín, el modelo Bukele contra el crimen y más para el fin de semana.
Las tensiones comerciales entre Washington y Pekín no cesan.
El miércoles se divulgó que, por primera vez en 20 años, Estados Unidos compró más mercancías de México que de China.
En parte esto se debe al fin de la pandemia, cuando los consumidores estadounidenses compraron todo tipo de artículos hechos en China durante el confinamiento.
En 2021, “el mundo no podía conseguir suficientes productos chinos, y en el 22 se hartó de los productos chinos”, dijo en un artículo reciente Brad Setser, economista e integrante sénior del Consejo de Relaciones Exteriores.
Pero los expertos señalan que las políticas restrictivas del gobierno también influyen: la gestión de Donald Trump impuso aranceles a las importaciones chinas, que han seguido durante el mandato de Joe Biden. Y la disaster de la cadena de suministro ha ocasionado que muchas empresas retiren sus operaciones de producción de China y las trasladen a lugares más cercanos y menos riesgosos, aunque con salarios un poco más elevados.
“Las estrellas se están alineando para México”, dijo Marco Villarreal, un exejecutivo de Caterpillar que ahora se dedica a ayudar a que las empresas extranjeras se establezcan en el país.
Aquí puedes leer el reportaje completo.
P. D.: Por cierto, las empresas tecnológicas, a pesar de estar en una buena posición económica, siguen recortando private. En este artículo explicamos por qué. (Y en este otro reportamos sobre cómo algunos trabajadores de estas grandes compañías están grabando sus despidos).
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Cuando Priscila Pellissier Pérez tenía 7 años, su tío le enseñó a prestar atención a las aves en su barrio de San Martín de Porres, un distrito de clase trabajadora de Lima, Perú.
“Es un barrio con muchas carencias, cercano al río Rímac”, dijo por teléfono, y “está totalmente contaminado”. Pero cerca de ese río, que abastece a la capital peruana de agua, había un aleteo de vida.
“Recuerdo las vocalizaciones. Escuchaba primero que pasaba siempre a cierta hora de la tarde, como que ladraba un perro”, dijo. “Hasta que me di cuenta de que period un ave, no un perro, una garza huaco la que estaba pasando”.
Ahora, Pellissier Pérez, de 35 años, colabora con CORBIDI, una organización peruana de conservación y biodiversidad y, entre otras labores, anima a que las personas observen las aves de su entorno. “Planteamos la observación como un buen escape para situaciones de estrés que uno encuentra en la ciudad”, dijo. “La equiparamos con el mindfulness”, o conciencia plena.
También comentó que es una oportunidad de aprender a identificar las especies que nos rodean y, eventualmente, ayudar a protegerlas. No es necesario contar con binoculares, comentó Pellissier Pérez, pero sí conectar con el presente y poner los cinco sentidos para prestar atención, algo que “cada vez hacemos menos”.
Para empezar, te invitamos a inscribirte en este formulario. De este modo, a partir de febrero y durante el mes de marzo te enviaremos desafíos por correo electrónico todos los jueves.
Mientras tanto, te invitamos a ubicar un grupo en tu localidad con el que puedas avistar aves. Visita esta página creada por BirdLife internacional y esta otra del Laboratorio de Ornitología de la Universidad de Cornell, aliados de este proyecto, en las que podrás encontrar comunidades y eventos a los que sumarte.
—Patricia Nieto y Sabrina Duque producen y editan este boletín.
